Ya hace un par de semanas que volví de Horsens y desde entonces he estado intentando escribir esta entrada del blog en la que quiero resumir que ha significado para mi esta experiencia llamada Erasmus y me he dado cuenta que, por mucho que me empeñe y por muchas vueltas que le dé, es imposible plasmar todo lo vivido en unas líneas de texto. Ni en diez ni en doscientas. Así que voy a intentar reflejarlo lo mejor que pueda.
Antes de pedir la beca fueron muchas las cosas que había escuchado y leído sobre todo lo que rodea al mundo Erasmus y, si había algo que tenía claro, es que quería vivirlo en primera persona. Hoy, y tras 9 meses en Dinamarca, tengo una opinión propia de lo que significa ir de Erasmus y todo lo que ello conlleva.
El Erasmus no es sólo fiesta, borracheras y “aprobados fáciles”, como muchos creen. Es mucho más que eso.
La beca Erasmus te permite vivir una experiencia única e irrepetible en un país diferente con una cultura diferente. Esto te permite ver y valorar las virtudes y descubrir las carencias de tu país y también contrastarlo con otras personas de distintas nacionalidades. Las mismas personas que hacen que la experiencia sea inolvidable. Aprendes a desenvolverte y sobrevivir hablando un idioma que no es el tuyo. Descubres un sistema educativo diferente, en el que se potencia el trabajo en equipo y la planificación de proyectos (al menos en Horsens).
En definitiva, y a mi modo de ver, es una experiencia necesaria y diría que casi obligatoria que no se debe dejar escapar y que te ayuda a crecer como persona.
Antes de pedir la beca fueron muchas las cosas que había escuchado y leído sobre todo lo que rodea al mundo Erasmus y, si había algo que tenía claro, es que quería vivirlo en primera persona. Hoy, y tras 9 meses en Dinamarca, tengo una opinión propia de lo que significa ir de Erasmus y todo lo que ello conlleva.
El Erasmus no es sólo fiesta, borracheras y “aprobados fáciles”, como muchos creen. Es mucho más que eso.
La beca Erasmus te permite vivir una experiencia única e irrepetible en un país diferente con una cultura diferente. Esto te permite ver y valorar las virtudes y descubrir las carencias de tu país y también contrastarlo con otras personas de distintas nacionalidades. Las mismas personas que hacen que la experiencia sea inolvidable. Aprendes a desenvolverte y sobrevivir hablando un idioma que no es el tuyo. Descubres un sistema educativo diferente, en el que se potencia el trabajo en equipo y la planificación de proyectos (al menos en Horsens).
En definitiva, y a mi modo de ver, es una experiencia necesaria y diría que casi obligatoria que no se debe dejar escapar y que te ayuda a crecer como persona.
Así que, si alguien me pregunta acerca del Erasmus mis palabras siempre serán positivas y mi mensaje claro: Hazlo.
Con esto pongo punto y final al blog, al menos en lo que a mi vivencia personal se refiere, pero no descarto alguna entrada más con algunos consejos o respondiendo a muchas de las dudas que me llegan por e-mail y que seguiré respondiendo encantado.
No quisiera despedirme sin antes mandar un saludo a todos los que me habéis seguido estos meses y a todos los que han hecho que esta vivencia haya sido posible e inolvidable. ¡Gracias!
Con esto pongo punto y final al blog, al menos en lo que a mi vivencia personal se refiere, pero no descarto alguna entrada más con algunos consejos o respondiendo a muchas de las dudas que me llegan por e-mail y que seguiré respondiendo encantado.
No quisiera despedirme sin antes mandar un saludo a todos los que me habéis seguido estos meses y a todos los que han hecho que esta vivencia haya sido posible e inolvidable. ¡Gracias!